EN LA TARDE, HAY UN MOMENTO PERFECTO.
EN EL QUE LA LLANURA PARECE TENER ALGO QUE DECIR.
Y NUNCA DICE NADA O NO LO ENTENDEMOS
O LO ENTENDEMOS Y NO LO PODEMOS TRADUCIR.
COMO UNA MUSICA DEL SOL, QUE NOS ENCUENTRA AQUÍ, MIRÁNDONOS.
Y AUNQUE AHORA MARTE, YA NO SEA UN MISTERIO
IGUAL ES UN ACIERTO CONMOVERSE HASTA MORIR
FLASHEANDO CON LAS ESTRELLAS Y SU SILENCIOSO CONCIERTO
NOS REVELAN LO PEQUEÑO QUE SIGNIFICA EXISTIR.
PERO LA LUNA NOS ALUMBRO Y NOS DESCUBRE AQUÍ, MIRÁNDONOS!.
SINTIENDO EL MAR Y COMIÉNDONOS LA BOCA
NOS DIVIERTE VER A LAS OLAS EN SU INCESANTE IR Y VENIR
PUESTO QUE TODO ES VERDAD Y QUE NADA ES TAN CIERTO
COMPRENDEMOS EL SIN SENTIDO DE CONVENCERSE DE NUESTROS PROPIOS ARGUMENTOS PARA DISCUTIR.
Y LA MAREA NOS MAREÓ, Y NOS ARROJA AQUÍ JUSTO NOS DEJA MIRÁNDONOS!.