Ando enredado en este baile del que elije narrar su historia
Hacerse cargo de la vida y lo que sigue, de la memoria
Doblar la espalda para cargar con su cruz
Sembrar la sombra y después cosechar luz
Sigo extraviándome en senderos invisibles (nacen de adentro)
Improvisando a cada paso el que le sigue, en rumbo incierto
Nunca se pierde quien no tiene a dónde ir
Siempre se llega si el andar también es fin
No, no ser libre en mi vuelo
Eso nunca, esa no es opción
Ni despedirme de este suelo
Sin haber buscado quién puedo ser yo
A veces vienen a exhortarme los fantasmas (saben su juego)
Dicen del orden de las cosas, las costumbres, y algo del tiempo
Por más que insista en confundirme la razón
No hay voluntad que pueda más que el corazaón