Desciende una abundante niebla siempre que te acercas...
Se despeja lentamente a medida en que te alejas
Vuelves a diario caminando por la misma senda,
Desprendes un aroma que durante días me impregna
Me tumbo en ese campo desolado entre la hierba
Esperando el momento en que retorne la fría niebla
Que anuncie la llegada del sonido de tus piernas
Moviéndose a destiempo y acercándose a mi puerta:
Esa que siempre está abierta,
Pero a menudo cierras...
Que está cubierta de pintura desgastada en su madera
En la que me despiertas
Siempre a golpes de tormenta
Y que al abrir los ojos me devuelve a la marea
Siempre hay pájaros en mi cabeza
Lo tengo todo en contra, no sé si te has dado cuenta
Y noto en mi garganta el leve roce de tus cadenas,
No llegaré a quitarlas de ninguna de las maneras...
Esa que siempre está abierta,
Pero a menudo cierras...
Está cubierta de pintura desgastada en su madera
En la que me despiertas
Siempre a golpes de tormenta
Y que al abrir los ojos me devuelve a la marea
Esa que siempre está abierta,
Pero a menudo cierras...
Que está cubierta de pintura desgastada en su madera
En la que me despiertas
Siempre a golpes de tormenta
Y que al abrir los ojos me devuelve a la marea