Espera, recuerda los años felices que hemos pasado.
Y piensa en el camino que hemos juntos formado.
No dejes que mi cuerpo tiemble sin tu a mi lado.
No olvides, la luna vibra cuando el amor brilla en nuestras manos.
Que el sol espera cada mañana un eterno abrazo.
No dejes que el jazmín marchite en solitario.
No dejes que se apague el fuego de la pasión
Y que la lluvia inunde en silencio esta habitación.
Recuerda aquella promesa que nunca habría despedidas,
Porque cuando tu boca se juntó a la mía,
Con el sonido del alma, firmamos el lazo inmortal
Que procurará el amor hasta la eternidad.
No marches, con tu partida se va mi sueño, con tu sonrisa.
Y en mi obsesión por llorar sería un muerto en vida.
No dejes que la angustia corra por la cornisa.
No dejes se apague el fuego de la pasión
Y que la lluvia inundé en silencio esta habitación.
Recuerda aquella promesa que nunca habría despedidas,
Porque cuando tu boca se juntó a la mía,
Con el sonido del alma, firmamos el lazo inmortal
Que procurará el amor hasta la eternidad.
Espera... ¡No me dejes! Espera...
Espera... ¡No me dejes! Espera...